viernes, 15 de mayo de 2015

Vástagos en Rusia y China


Los Documentos señalan un factor incidental que influye en las civilizaciones de forma aleatoria: El factor genético.

 Se nos narra en varios capítulos que la sangre adanita provocó un salto en las antiguas civilizaciones en lo artístico y cultural. Estos son los pueblos de la antigüedad que nos fascinan (como los pacíficos etruscos, gobelike tepe y los egipcios en sus primeras etapas, etc).

Estas civilizaciones colapsaron porque la sangre adánica se diluyó con pueblos circundantes más belicosos y primitivos. Sin embargo, en las últimas etapas estas civilizaciones lograron un breve repunte bélico dominador ya que la inteligencia superior adanita al ser mezclada con la belicosidad primitiva causó que estas potencias lograran un feroz expansionismo militar. Usaron su desarrollo mental superior, ya no tanto en lo artístico, sino para fabricar armas y métodos superiores de conquista. Lo vemos en los Asirios, Griegos y Romanos. Finalmente éstos pueblos se desintegraron por estas causas, incluyendo el mestizaje y la degradación moral y espiritual.

Ahora bien, aunque toda la sangre adánica ha sido mezclada en el mundo, hay ciertas porciones mayores aún presentes en pueblos modernos que crean la mezcla peligrosa entre inteligencia y belicosidad, lo cual genera las potencias. 

Algo interesante se nos dice sobre los Chinos y Rusos. Veamos primero sobre Rusia y la penetración andita en esas tierras (mezclas de adanitas y noditas):

(893.1) 80:4.5 La totalidad del mundo habitado, fuera de China y de la región del Eufrates, había hecho muy poco progreso cultural durante diez mil años, cuando hicieron su aparición los jinetes vigorosos anditas en el sexto y séptimo milenio antes de Cristo. A medida que se iban desplazando hacia el oeste a través de las planicies rusas, absorbiendo lo mejor del hombre azul y exterminando lo peor, se fueron mezclando hasta producir un solo pueblo. Éstos fueron los antepasados de las así llamadas razas nórdicas, los precursores de los pueblos escandinavos, alemán y anglosajón.

(893.3) 80:5.1 Las tribus de Europa septentrional estaban siendo reforzadas y elevadas constantemente por el caudal migratorio constante desde Mesopotamia a través de las regiones desde el Turquestán a la Rusia meridional, y cuando las últimas olas de la caballería andita sobrecogieron a Europa, ya había más hombres con herencia andita en esa región que en cualquier otra parte del mundo.

Las condiciones geográficas de Rusia de alguna forma han “encapsulado” a esta genética en ese enorme país. En la Europa occidental la sangre adánica se ha diluido más rápidamente con los inmigrantes, mezclas de pueblos, etc.

El pueblo Chino también recibió raudales de los adanitas y las condiciones geográficas también encapsularon a la raza china que contiene escondidos amplios genes de los adanitas:

(888.8) 79:8.15 El período formativo de la civilización china, que comienza con la llegada de los anditas, continúa hasta el gran despertar ético, moral y semirreligioso del siglo sexto antes de Cristo.

(886.1) 79:6.13 De no haber sido por las barreras montañosas y la posterior decadencia de la cultura espiritual, la raza amarilla indudablemente habría atraído la mayor parte de la migración andita desde el Turquestán e indudablemente podría haber dominado rápidamente la civilización mundial.

Las momias chinas pelirrojas dan testimonio de ese ingreso adanita en esos tiempos lejanos.

Y parece que los Chinos jugarán un papel clave en el destino del mundo, según los Documentos escritos en los años treinta:

(888.9) 79:8.16 Así pues la antigua civilización de la raza amarilla ha perdurado a través de los siglos. Han transcurrido casi cuarenta mil años desde que se produjeron los primeros avances importantes en la cultura china. A pesar de los muchos retrocesos, la civilización de los hijos de Han sigue siendo la que más se acerca a un cuadro de progreso continuo e ininterrumpido que llega directamente hasta el siglo veinte. Los desarrollos religiosos y mecánicos de las razas blancas han sido de alto orden, pero no han superado nunca a los chinos en lealtad familiar, ética de grupo o moralidad personal.

(888.10) 79:8.17 Esta antigua cultura ha contribuido mucho a la felicidad humana; millones de seres humanos han vivido y muerto, bendecidos por sus logros. Durante siglos esta gran civilización ha descansado sobre los laureles del pasado, pero ya está volviendo a despertar para visualizar otra vez los trascendentales objetivos de la existencia mortal, enfrentando nuevamente la infatigable lucha por el progreso sin fin.

¿Qué sucederá con los Estados Unidos? 

La mezcla racial de los chinos y rusos ciertamente ha ocurrido, pero han mantenido la característica de la infiltración adánica de forma más estable. Estados Unidos también lo hizo en su tiempo, pero actualmente la nación de Norteamérica está diluyendo rápidamente su genética al incluir a inmigrantes de todas partes del mundo. Esto sin duda beneficia al mundo porque "exporta" la carga andita, pero colateralmente debilita a Estados Unidos como potencia hegemónica. Ese es el precio de ser una potencia Cosmopolita de la misma forma como ocurrió con Grecia y Roma.

Estados Unidos ciertamente se debilitará y tanto Rusia como China que aún poseen más estabilidad racial, están destinados a llevar el liderazgo global. Esto no es racismo, sino un análisis de la realidad y como los pueblos se alzan transitoriamente en el escenario mundial. Finalmente todas las razas serán amalgamadas más plenamente, pero la bandera del liderazgo mundial será transferido a Rusia y China en el futuro inmediato. Ya están ocurriendo ante tus ojos estos hechos históricos.

(899.3) 80:9.16 Esta cultura europea continuó creciendo durante cinco mil años y hasta cierto punto mezclándose. Pero la barrera del idioma impidió la reciprocación plena de las varias naciones occidentales. Durante el último siglo esta cultura ha estado experimentando su mejor oportunidad para mezclarse en la población cosmopolita de América del Norte; y el futuro de ese continente estará determinado por la calidad de los factores raciales que se permiten en su población presente y futura, así como también por el nivel de la cultura social que se mantiene.